PICO CORTÉS POR LA CANAL DEL JIERRU


Aparcamos en Vega de Sotres o Vega de Toro (1060 m). Nos dirigimos S, por la pista paralela al rio Duje, hacia los puertos de Aliva.
A 1 Km de distancia, más o menos, una senda nos introduce SE, por la izquierda, en las cuestas herbosas que desembocan en la canal del Jierru. Vamos a ascender al Pico Cortés por su cara norte.

La pendiente, al principio suave en el Cuetu Mostaxu, se va pronunciando poco a poco hasta alcanzar un 30 0 40 % de inclinación. Desaparece la hierba dando paso a las pedreras y a un terreno mixto entre piedra descompuesta y hierbajos. Variamos la dirección a S, yéndonos a la derecha, para situarnos justo debajo de los desplomes de la cima. En estos momentos la pendiente es muy acusada y el riesgo de caída de piedras es manifiesto. Hay que tener mucho cuidado tanto para subir como para bajar este tramo. De hecho la consideración de F+ o PD- viene dada por este tramo. No se trata de pasos técnicos o que exijan especial destreza, sino del riesgo de caída de piedras. También es importante señalar la dureza de los tramos más inclinados que exigen al montañero estar en plena forma. No se puede afrontar esta ascensión con despreocupación porque tiene riesgos y dureza.
Ya sólo nos queda el último tramo, muy pronunciado y con piedras descompuestas, que nos sitúa en la cresta a los pies de la cima.

 Descendemos SO siguiendo los hitos y las marcas amarillas. Sin perder la orientación salvamos los diferentes resaltes o pliegues de la montaña por un terreno más fácil que el de subida, pero también con riesgo de caídas y desprendimientos, con pedreras muy empinadas. Subimos una pequeña chimenea sin importancia y nos colocamos debajo de una “elevación rocosa” de cota 2264m, pero que no es el Pradu Cortés (2288m). El camino oficial continua SO hasta el collado Cortés, a los pies del Prau Cortés, desde aquí desciende OSO por la canal de las Grajas, luego O hasta la pista de los puertos de Aliva.

Nosotros escogimos la Canal de Covarones y descendimos las pedreras que bajaban desde la “elevación rocosa” siguiendo unas marcas amarillas. Descenso sin problemas, pero con tensión y cuidado. En un punto, para salvar el último resalte, tuvimos que hacer un pequeño destrepe fácil. Después O recorrimos las laderas del Pico Cortés que miran al Duje hasta que encontramos la pista de los puertos de Aliva. De nuevo a Vega de Sotres.