LOS INFIERNOS DESDE LOS BAÑOS DE PANTICOSA




El sábado amaneció sin lluvia pero encapotado en los Baños de Panticosa. Nuestra pretensión era subir al pico los infiernos. Los diferentes partes meteorológicos nos informaron de que no llovería, pero las cimas estarían cubiertas por nubes densas sin apenas visibilidad alguna. Aún con todo, teníamos ganas y nos aventuramos.

Después de dormir y desayunar en La Casa de Piedra iniciamos el recorrido que nos supuso superar un desnivel acumulado de 1700m y una distancia de más 20km (ida y vuelta).
Salimos de La Casa de Piedra (1660 m) cuando el amanecer tocaba las cimas de Garmonegro y Argualas. Cogimos la senda de la GR11 (marcas blancas y rojas detrás de la Casa de Piedra) remontando el barranco del río Caldarés (N) hasta llegar a la altura del refugio del ibón de Bachimaña junto al embalse de Bachimaña bajo (2180 m). Este tramo, muy frecuentado, conserva su belleza natural. El río, encajado en el barranco, crea varias cascadas y saltos de agua cristalina que dan un aire fresco y salvaje al camino. El trazado atraviesa varias zonas de roca, más o menos pulida, pero que no tienen ningún peligro porque están protegidos con sirgas metálicas, en concreto conté cuatro sirgas. Pero en invierno ojo con estos pasos. La parte final se conoce como la cuesta del Fraile con su imponente cascada del mismo nombre. Al principio de la ascensión pudimos contemplar, mirando hacia el sur, Las Crestas de Foratura y más adelante, cerca del refugio de Bachimaña, hacia el oeste ya sobresalían las puntas del Pico Serrato y Xuans.

Una vez en el embalse de “Bachimaña bajo” seguimos los hitos y las marcas de la GR11 (NE) que avanzan por el margen derecho. Inmediatamente continuamos por el margen derecho del embalse de “Bachimaña alto”. El camino da un quiebro de 90º a nuestra izquierda (NO) y continúa recorriendo el margen, pero a cierta altura de la orilla. Hacia el noreste, dominando el embalse, sobresalen las cimas de Marcadou sur y Grand Pic de Peterneille.
Dejamos atrás el embalse y siguiendo el curso del arroyo y las marcas de la GR11 (O) alcanzamos los ibones azules (2400 m). Un paraje soberbio donde los haya. El atractivo agreste de los ibones, rodeados por las paredes de Punta Zarra, Pico Gaurier y Pico de Piedrafita al norte, de los Infiernos y Arnales, con sus neveros perpetuos, restos de anteriores glaciares, al oeste y del Pico de Bachimaña al sur, y el silencio del lugar, solo roto por mis compañeros y el murmullo del agua, me trasmitían una sensación, mezcla de tranquilidad y expectativa por lo que descubre la vista en cada momento.


Superamos los ibones. La cuesta se empina para llegar al cuello del infierno (2760 m) que separa el bloque de los Infiernos del Pico de las Marmoleras. Otro regalo para la vista, a nuestros pies (O) se extiende el ibon de Tebarray y a la derecha se yergue, imponente, el pico del mismo nombre.
A nuestra izquierda (S) nos esperaba una empinadísima ladera de piedra descompuesta que culmina en la cumbre del Garmo Blanco (2986 m), recibe el nombre por su marmolera blanca, especie de antecima que anuncia la proximidad del Pico infiernos.


Entre nieblas distinguímos la cresta que se dirige a las tres cimas de los Infiernos, francamente con un aspecto tenebroso. Avanzamos con cuidado siguiendo los hitos (S), a veces usando las manos para asegurar el paso. Llegamos a un rellano donde los hitos señalaban al este para subir los últimos 70 m de desnivel y alcanzar la cima occidental de Los Infiernos (3074 m). Luego atravesamos la marmolera de los Infiernos, una cresta blanca suficientemente ancha aunque muy espectacular y aérea, (SE) para llegar a la cima central (3082 m), y después de una pequeña depresión (E) a la cima oriental (3076 m).
Debido a las nubes tuvimos que cambiar de planes, además de no poder hacer ni una foto de las cumbres cercanas. Queríamos volver por el collado de Pondiellos, pero implicaba descender por la canal entre las cimas central y oriental y sin conocerla y sin visibilidad decidimos dar la vuelta por donde vinimos, aunque fuera más largo.


Nota.- Con carácter general se considera el margen derecho o izquierdo de un embalse o un río tomando como referencia la cabecera del río o arroyo que alimenta el embalse y la dirección del descenso del agua. En las descripciones es fácil confundirse porque se toma como referencia nuestra posición y si vamos subiendo por la cuenca de un pantano o río con frecuencia nos referimos a nuestra izquierda o nuestra derecha. Sin embargo deberíamos tomar como referencia la dirección del agua.
Nota.- Las rocas de estos macizos se consideran rocas metamórficas que se originan por transformaciones de otras anteriores causadas por altas presiones o temperaturas. Las más características son las que rodean a los granitos en el Pirineo Axial. Las altas temperaturas de los magmas que aquí existieron afectaron a las rocas mediante transformaciones de sus minerales, o su aumento de tamaño (recristalización). Este es el origen de las marmoleras como las de los Infiernos. El mármol se ha originado a partir de la caliza que existiría aquí previamente. Está formado por cristales de calcita que distinguimos a simple vista. Se raya y reacciona al ácido como la caliza. Si es puro resulta de color blanco o bastante claro, pero pequeñas impurezas de otros minerales pueden darle tonos variados.



DATOS
DISTANCIA: 20,9KM